Un muerto y cuatro detenidos por crimen en ruta
La Policía cercó a los delincuentes y detuvo a otros dos sospechosos por la muerte de Oscar Acosta en el departamento de Tacuarembó. Uno de los delincuentes se autoeliminó antes de ser detenido
En horas de la tarde de éste viernes 3 de enero del año en curso, la Policía detuvo a otros dos sospechosos por el asesinato de un comerciante en Ruta 5. El operativo, que se extendió durante toda la pasada jornada terminó con dos delincuentes detenidos y uno autoeliminado antes de su detención, según la información obtenida.
Vecinos de la zona alertaron a la Policía que los hombres se habían escondido en una escuela. Finalmente este dato no fue certero, pero pudieron dar con los buscados en una zona cercana, en un barrio periférico de Tacuarembó.
En la madrugada del pasado viernes, además, la Policía había detenido a otros dos sospechosos de haber participado en la muerte de Oscar Damián Acosta, de 33 años.
El caso
El director de Investigaciones de la Jefatura de Policía de Tacuarembó, Héctor Rodríguez, dijo que los delincuentes venían circulando por la ruta cuando rompieron su auto, lo atravesaron en la ruta y detrás venía la camioneta del fallecido. Lo que querían, afirmó Rodríguez, era otro auto y por eso realizaron el piquete.
El hecho ocurrió cuando el grupo de delincuentes construyó un piquete en una ruta y mató a Oscar Damián Acosta, de 33 años. Era un comerciante local que vendía productos panificados y venía de pasar Año Nuevo en San Gregorio de Polanco. En el momento del homicidio, intentó evadir a los delincuentes, que le dieron dos disparos. Viajaba junto a su esposa y su hijo.
Los agresores estaban armados, se instalaron en la convergencia de las Rutas 5 y 43, en el camino entre la capital y San Gregorio. Armaron una barricada y desde allí disparaban contra los automovilistas que volvían del balneario a Tacuarembó. Antes de matar a Da Costa habían intentado detener a otros dos vehículos.
La policía sospecha que comenzaron a disparar en busca de otro vehículo pues el que poseían estaba con una rueda rota. Según el director de Investigaciones “no venían fugando de ningún lugar”.
El hombre, de 33 años, fue enterrado ayer viernes y su familia pidió que le prensa respetara su privacidad en este momento de dolor.
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